Ahora que el Coronavirus hizo crisis en el estado de Chihuahua y que generó la saturación de hospitales, volvió a ponerse sobre la mesa el viejo tema de la escasa inversión del IMSS y el ISSSTE en los últimos años en la entidad.
Particularmente el asunto se agrava en la Ciudad de Chihuahua donde hay un obsoleto hospital Morelos construido por los años 70s y una Clínica Lázaro Cárdenas que está para dar vergüenza.
Desde hace años se estuvo pidiendo de parte de la sociedad que diputados y demás autoridades hicieran las gestiones para construir un nuevo hospital en Chihuahua, acorde al número de habitantes que hay y a las aportaciones que hacen los patrones, pero casualmente nunca se concretó.
En contraste pulularon hospitales privados y clínicas, convirtiéndose estos en verdaderos negocios.
Ahora con la crisis los hospitales públicos están tronados por el escaso número de camas y equipos que tienen y los hospitales privados se están llenando los bolsillos con la atención a pacientes Covid.
Instituciones como Pensiones, ISSSTE e Imss que subrogaban operaciones a hospitales privados, sufren ahora por que simplemente los particulares les cerraron las puertas para hacer ellos negocio.
Por supuesto que quienes están sufriendo las consecuencias son los derechohabientes de los servicios médicos públicos y aunque se está en medio de la crisis ojalá y la saturación hospitalaria actual haga que por fin se busquen concretar hospitales públicos para Chihuahua.
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Columna publicada en tiempo.com.mx y Radiorama Chihuahua.
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